¿Para qué sirven las semillas en tu alimentación?
Las semillas son cápsulas de nutrientes que enriquecen cada plato. Todas son muy nutritivas:
Semillas de chía: se consideran una fuente equilibrada de ácidos grasos omega-3 y omega-6, contienen proteínas, fibra y son una buena fuente de hierro, calcio, potasio, magnesio, fósforo y zinc.
Para aprovechar bien de todos los nutrientes que contiene hay que ablandarlas (hidratándolas con agua o en una bebida vegetal) o machacarlas. Semillas de cáñamo (hemp): se destacan por contener todos los aminoácidos esenciales. Como ’topping’ en la avena o en el yogur, van de show.
Semillas de linaza: contienen fibra, vitaminas del complejo B, ácidos grasos esenciales omega-3 y antioxidantes. Por su tamaño van mejor en ensaladas, arroces y dentro de los sándwiches.
Semillas de girasol: aportan hierro, fósforo, calcio, magnesio y vitamina E. Las puedes moler un poco y agregar en las sopas, ensaladas o en los arroces.
Semillas de calabaza: por su alto contenido de carotenoides, tienen propiedades antioxidantes. Perfectas para platos salados: cremas, arroces, ensaladas, wraps. Las puedes triturar y hacer como un tahini para untar a los panes.
Y hablando de semillas, merece la pena recalcar que, a diferencia de lo que se pensaba en un pasado, las personas con diverticulosis pueden y deben comer semillas. No hay evidencia científica de que se alojen en los divertíulos y empeoren la condición. Todo lo contrario. 👏🏽
¿Forman parte de tu dieta?, ¿cómo las comes?