Antes de sustituir la leche de vaca por bebidas vegetales conviene que evalúes su rotulación nutricional.

Los otros días un cliente me comentó que había sustituido la leche baja en grasa por la de soya con sabor a vainilla porque, según lo que había escuchado, era una alternativa más saludable. Ummmm….no necesariamente.

De las tantas bebidas vegetales que existen en el mercado, sin duda que la de soya es la más completa. De hecho, es la que yo tomo ya que, además de ser saludable, su consistencia es bastante similar a la de vaca y va perfecta para hacer la espumita de mi macchiatone mañanero.😍

La bebida de soya aporta 3.2 g de proteína por cada 100 ml, una cantidad similar a la leche de vaca, pero sin las grasas saturadas. Su principal punto débil pudiera ser su bajo aporte de calcio y vitamina D. Cosa que ya está resulta dado que la mayor parte de las que conseguimos en el mercado son enriquecidas con ambos nutrientes. Y perfectamente apta para los intolerantes a la lactosa. 👍

Ahora bien, las bebidas vegetales que están saborizadas con vainilla, chocolate, fresa y demás, no son una alternativa saludable. Y con el reclamo de que son plant based nos lo hacen creer así. La cantidad de azúcar que contienen es exorbitante, entre 8-10 g por cada 100 ml. O sea, casi el doble de la leche de vaca y a través de azúcares libres y no de azúcares intrínsecas como la lactosa. ¿Entonces? Evalúa la rotulación nutricional y su lista de ingredientes. Lleva a casa aquella que no tenga sabor y que esté enriquecida con calcio, vitamina D y si lleva vitamina B12, mejor aún. 

¿Y las bebidas de cereales?

A las bebidas de arroz y de avena hay que prestarles MUCHA atención y leer la rotulación nutricional. Para preparar estas bebidas (ocurre mucho con la de avena) y darles un sabor más dulce, los fabricantes someten la bebida a un proceso llamado ‘hidrolización’ mediante el cual se añaden enzimas que transforman sus hidratos de carbono en azúcares simples. ¡Y aún así pueden llevar el reclamo de no sugar added! ¿Entonces? Si tiene más de 2.5-3 g de azúcar por 100 ml, busca otra opción. El azúcar que contiene deja de ser un azúcar saludable (intrínseco) y pasa a ser un azúcar libre de la cual tenemos que mantenernos al margen.

 ¿Y la de almendras?

Una de las preferidas ya que no tiene ese saborcito a ‘habichuela’ que tiene la de soya. Tanto si se prepara en casa como si se opta por comprarla, el proceso de fabricación es similar. Las almendras se sumergen en agua durante ~ 48 horas, se escurren y se enjuagan. Luego se muelen hasta quedar com una papilla y como último paso, se cuelan, para separar la parte sólida del líquido. En este colado se pierde gran parte de su contenido de fibra y proteína. Es por eso que la bebida de almendra no se considera una fuente proteica.

¿Y qué hay de su contenido azúcar? El sabor de esta bebida es muy ligero y resulta poco agradable. O, al menos, no lo suficientemente dulce como para compararse con la leche de vaca. Entonces, para hacerla más apetecible, lo normal es que se le agregue azúcar. En muchas ocasiones superando los 10 gramos de azúcar añadido por cada 100 ml. 👎🏾 Evalúa su rotulación nutricional. 

Cuéntame, ¿utilizas bebidas vegetales? ¿cuál es tu preferida?