Sol, arena y exposición… el entusiasmo por la llegada del verano debe acompañarse de medidas preventivas que te mantengan saludable y eviten consecuencias como quemaduras en la piel, deshidratación o infecciones. Se puede disfrutar de los agradables rayos del sol, de las olas del mar y lo refrescante de las piscinas, sin tener que lamentarse después. Por eso, te compartimos diez consejos básicos para mantenerte saludable durante el verano.
Hidratación constante. Ante las altas temperaturas, la hidratación es indispensable. Se recomienda tomar dos litros diarios de agua diaria, aunque no tengas sed. “La sed no es un antojo”, precisa la nutricionista y dietista Carla de La Torre. “Debemos beber agua con regularidad, sobre todo con las comidas, pero, si nos encontramos en situaciones en las que aumenta el calor, debemos compensarlo incrementando la ingesta hídrica con agua y frutas”, exhorta.
Una dieta ligera: menos carnes, más frutas y verduras “Comer fruta debe ser parte de la estrategia de hidratación durante el verano”, comenta De la Torre. Las frutas y los vegetales son los alimentos con mayor porcentaje de agua en su composición. “La sandía, el melón, la piña, el tomate y el pepino son perfectos para refrescarse”, afirma.
Del mismo modo, la coach nutricional aconseja el consumo de ensaladas. “Debemos comer menos carnes y procurar llenarnos menos. Una comida copiosa como puede ser un bistec encebollado con arroz y habichuelas, conlleva una mayor termogénesis y, por tanto, genera mayor calor corporal. Por eso, las ensaladas son perfectas para el verano”, asegura.
Prevén las intoxicaciones alimentarias. Los alimentos se deben conservar bien refrigerados y no exponerse a temperaturas extremas. Si vas a la playa, a la piscina o a un picnic, maximiza la duración de la refrigeración, enfriándolos previamente y utilizando una neverita portátil. De La Torre recomienda llevar las frutas enteras sin cortar. “A modo preventivo, todas las frutas con piel como el guineo, las uvas, las manzanas y el melocotón, son una buena opción”, puntualiza.
Protégete del sol, incluso en los días nublados. Los rayos ultravioletas (UV) pueden penetrar la piel y provocar quemaduras, envejecimiento prematuro, daño ocular y ciertos tipos de cáncer. La recomendación fundamental para la prevención del cáncer en la piel es utilizar protector solar cada vez que salgas al aire libre.
El médico de familia Joel López recomienda que el factor de protección solar (SPF en inglés) sea, como mínimo, 30. “Lo importante es el uso correcto del bloqueador. La mayoría de las personas se coloca el bloqueador una sola vez y están el día entero en el agua o en la arena, sin protegerse nuevamente”, explica.
Durante el verano, se aconseja que, si vas a tomar el sol, sea en períodos cortos que no excedan de 20 minutos. “Lo ideal sería evitar el sol, pero sabemos que es parte de la diversión del verano; sin embargo, se recomienda eludir las horas de 11:00 a.m. a 1:00 p.m.”, aconseja el galeno que cuenta con 15 años de experiencia.
Cuida la piel. Hay que esforzarse por mantener la piel limpia e hidratada. La piel sufre los estragos del sol, el aire, la sal de mar o el cloro de la piscina. Por ello, es necesario que, luego de la exposición, apliques una crema hidratante que nutra y refresque la piel.
Usa ropa cómoda y liviana. Escoge telas ligeras, sueltas y de colores claros acompañadas de gafas de sol adecuadas y gorra o sombrero. López recomienda las camisas de manga larga que incluyen protección SPF y un buen sombrero que cubra la cara, el cuello y las orejas.
Ejercicio o actividad física. Aunque no se sugiere la actividad física bajo altas temperaturas, siempre se recomienda ejercitarse durante el verano. La mayoría de las personas, al romper las rutinas, descuidan las horas de sueño, la alimentación y los ejercicios. Puedes ejercitarte en las horas de menos calor, como la primera hora de la mañana o la última de la tarde.
Protección frente al COVID-19 Las medidas de prevención y protección contra el COVID-19 deben continuar. Por eso, el doctor López exhorta a evitar las actividades en ambientes cerrados, sobre todo con personas fuera del círculo familiar o cercano. Además, recomienda promover las actividades al aire libre, el lavado de manos, evitar tocarse la cara, el uso de mascarillas en lugares concurridos y no salir si la persona se siente mal.
“Para mí, debemos seguir todas las medidas de prevención que usamos hasta ahora, esto aún no se acaba y debemos seguir cuidándonos. Lo que no estoy de acuerdo es en quedarnos encerrados; eso es perjudicial para la salud mental”, enfatiza el galeno.
Seguridad en playas y piscinas. Visita con anticipación la página del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (drna.pr.gov), para informarte sobre las corrientes marítimas y el estatus de la calidad de las playas. Además, López sugiere:
- Utilizar salvavidas aprobados por la Guardia Costera.
- Evitar las playas con corrientes o fuerte oleaje.
- No nadar solo; utilizar el buddy system. Este es un “sistema de compañeros” en el que se acompañan y supervisan uno al otro.
- Evitar el exceso de alcohol.
- Vigilar a los niños en todo momento.
Protégete de los mosquitos Los meses de verano son más propensos a que aparezcan mosquitos. Por ello, es fundamental utilizar repelentes de insectos que no contengan más de un 30 % de DEET. Por lo general, los repelentes aseguran la protección de cuatro a ocho horas.
julio 10 2022, El Nuevo Día