No es necesario. La adoración calórica está sobrevalorada. Lo que realmente vale la pena conocer es la calidad de los alimentos que componen tu dieta.

En el 2021 ya nos queda clarísimo que comer 60 kilocalorías provenientes de un melocotón no es lo mismo que obtenerlas de una galletita con crema de melocotón. No todas esas calorías del melocotón atraviesan tu intestino delgado hasta llegar al torrente sanguíneo para ser usadas como energía o ser almacenadas. No, porque ese melocotón es complejo de digerir y supone en tu cuerpo un gasto de energía para poder metabolizarlo. En cambio, las calorías de esa galletita son mucho más fáciles de digerir.

Veámoslo así: los alimentos procesados son como alimentos predigeridos, parte del trabajo ya está hecho para ti. Es decir, absorbes más calorías al consumir mantequilla de almendras que al consumir la mima cantidad de almendras en su estado natural. ¿Me sigues?

Cada vez somos más los dietistas que nos alejamos de la obsoleta práctica de educar contar calorías y gramajes de macronutrientes, sin embargo, siguen resonando con fuerza por ahí. A quien verdaderamente le interesa inmortalizar este tema es a la industria alimentaria. Priorizando las calorías y los gramos de carbohidratos en su discurso de marketing intenta tranquilizar al consumidor que está luchando con el sobrepeso y les tiene terror.

Contar calorías y sumar macronutrientes no te llevará a ningún lado amig@. Lo que si puedes hacer, es librarte de las calorías vacías de una vez por todas. Esos productos de mínimo valor nutricional que no te aportan más nada que calorías: ni minerales, ni vitaminas, ni proteínas, ni ácidos grasos esenciales, ni fibra. Y que, a su vez, al ser productos hiperpalatables (hipersabrosos), una vez los pruebas no puedes parar de comerlos. ¿Verdad?

¿Quieres evaluar a diario tu alimentación? ¡Fenomenal! Deja de usar esas aplicaciones que traducen la comida en porcentajes de macronutrientes y evalúa tu alimentación de manera cualitativa, no cuantitativa. Anota en un diario lo que comes y evalúa lo siguiente:

  • ¿Como al menos 5 porciones de frutas y vegetales diariamente?
  • ¿Priorizo los alimentos integrales?
  • ¿Prefiero las carnes blancas ante las carnes rojas?
  • ¿Meriendo alimentos completos en lugar de procesados?
  • ¿Agrego grasas saludables a mis ensaladas?

Una caloría no es simplemente una caloría.

¡Buena semana!😄