Antes de entrar en materia, ¿sabías que la Unesco ha nombrado la dieta mediterránea como un Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad?

Y es que la dieta mediterránea, más que una pauta de alimentación comprende un conjunto de rituales, tradiciones y símbolos relacionados con los cultivos y cosechas agrícolas, la pesca y la cría de animales, y también con la forma de conservar, cocinar, compartir y consumir los alimentos.

En lo que respecta a nuestra salud, es la mejor dieta. Protege frente a muchas condiciones crónicas de salud, favorece al control de peso y alarga la esperanza de vida. ¡No es poca cosa!

Un reciente trabajo realizado por diferentes instituciones de países mediterráneos ha redefinido la pirámide de esta dieta adaptándola a un nuevo entorno. Los cambios más importantes:

  • Prioriza la proteína de origen vegetal frente a la animal.
  • Las legumbres, los frutos secos y las semillas ganan protagonismo. Se recomienda comerlos a diario.
  • El aceite de oliva debe ser la principal fuente de las grasas y el preferido para cocinar.
  • Se recomienda utilizar las especias y hierbas para dar más sabor a las comidas.
  • Los colores y las texturas aparecen por primera vez en la pirámide. La variedad es fundamental.
  • La copa de vino es opcional. El alcohol no aporta nada bueno.
  • Se incluye el café, el té y otras infusiones con hierbas. Por supuesto, sin azúcar.

Por otra parte, se han incluido algunos elementos relacionados con la cultura y el estilo de vida:

  • Moderación. La sociedad actual es mayoritariamente sedentaria, por lo que en la alimentación se debe tomar en cuenta el control de las porciones.
  • Cocinar. Debe ser una actividad relajada que disfrutemos a diario.
  • Socialización. La comida potencia la convivencia y el sentido de comunidad.
  • Estacionalidad. Los alimentos de temporada contienen más nutrientes.
  • Actividad. Practicar ejercicios regularmente ayuda a controlar el peso. Se exhorta a que se haga al aire libre y, de ser posible, en compañía de otras personas para reforzar los vínculos comunitarios.
  • Descanso. Para la salud es fundamental.

 

Conoce las nuevas mejoras a la dieta mediterránea

¿Qué te parecen los cambios? Sin duda alguna era de esperarse que se hablara de una dieta más respetuosa con el medio ambiente.