Sé el ejemplo.

Lo primero que hay que tener claro es que si queremos que nuestros niños coman bien, tenemos nosotros que comer bien. No es tan sólo decirlo, es ser el ejemplo y en eso consta la educación.

Tú puedes lograr que tus hijos quieran comer bien, el trabajo comienza en casa. Y ten presente que; una dieta pobre en la infancia es la antesala de una dieta pobre en la edad adulta yuna dieta rica en alimentos azucarados es en gran medida la responsable de la neofobia. La neofobia alimentaria es un tipo de trastorno alimentario en el que se evita el consumo de ciertos alimentos y se tiene miedo a probar algo nuevo. Los expertos lo consideran un comportamiento habitual entre los 2-6 años, pero, si se prolonga, las consecuencias nutricionales pueden ser muy negativas.

Algunos consejos:

🍓 Exposición regular. Aprovecha que estás con tus hijos en casa y exponlos a alimentos saludables y nuevos para ellos.

🍓 Ofréceles y enséñales a disfrutar de esos alimentos. Puedes comenzar con el método de bocados diminutos dándole de comer al niño en muchas ocasiones diferentes alimentos en porciones que no sean estresantes. Al niño hay que permitirle probar desde muy temprano diferentes sabores porque cuanto más joven sea, más desarrollada estará su capacidad de diferenciación y estará apto en un futuro para analizar con precisión lo que comerá.

🍓 No tengas alimentos insanos en casa a la vista. A ti te cuesta mucho no comerlo y sabes el daño que hace, pues imagínate que difícil es para tu hijo contenerse.

🍓 La sugestión para bien o para mal es clave. Busca alguna figura poderosa o atleta conocido que los niños admiren y que aparezca comiendo una fruta o un vegetal.Descarta esos productos insanos con envolturas de grandes héroes. Se sabe que el entorno influye grandemente en la percepción del alimento. 

🍓 No obligues a tu hijo a comer un alimento. Déjalo a la vista para que despierte su curiosidad en lugar de la rebeldía.

🍓 Incorpora la toma de dicisiones compartida. No le prohibas comer algo hablándole con un tono autoritario. Imponer un control rígido provoca todo lo contrario. En su lugar, junto con una buena dosis de amor, establece los límites y consecuencias de modo que el niño las entienda.

🍓 Constancia. Los gustos no están tallados en una piedra y no vienen determinados con la genética. Son maleables y lo mas efectivo para su desarrollo es la exposición continua.

Aprovecha bien esta cuarentena, que tenga propósito. 😉