Está comprobado que existe una cascada de círculos viciosos entre tus hábitos, las decisiones alimentarias que tomas a diario y el ansia por comer azúcar.

Cuando la hormona del estrés, cortisol, fluye por nuestro torrente sanguíneo aumentan los niveles de glucosa en sangre favoreciendo la resistencia a la insulina y la diabetes. Está demostrado que elevados niveles de cortisol nos aumentan el apetito por los alimentos superfluos, principalmente aquellos ricos en azúcar refinada consecuentes a un aumento de peso y sobretodo, de grasa visceral.

Pero no es solo el estrés, sino también la falta de sueño, terrible hábito que estimula el deseo por comer carbohidratos refinados y dulces al condicionar el nivel de las hormonas directamente relacionadas con el apetito (leptina y grelina) y aumentando el riesgo de obesidad,  ¿Cómo te sientes cuando llevas días sin poder dormir bien? Cansado, ¿cierto? Pues esto y la irritabilidad provocada, activa un sistema de recompensa a nivel cerebral que hace que tu cuerpo entienda que necesita más energía para combatir el cansancio, aumentando el apetito y las ansias por comer sin control.

Adquieres unos buenos hábitos de sueño:

  • Si eres un atleta, no debes dormir menos de 7 horas, este periodo de descanso nocturno debe ser el mínimo y debes respetarlo.
  • Si el ejercicio físico se realiza durante la noche puede provocar contrarrestar sus beneficios en el “estado de calma”. Si no estás durmiendo bien, intenta cambiarlo de horario.
  • Adquiere un horario para irte a dormir, pautar una rutina en los hábitos de horario facilita que nuestro cuerpo se prepare para el descanso y pueda conciliar el sueño.
  • Cena temprano y de manera moderada. Evita los carbohidratos refinados y los alimentos altos en grasas.
  • No veas la televisión desde la cama y evita el uso de portátiles ya  esto crea un estado de alerta en nuestro cerebro que impide descansar adecuadamente.

 

El sueño actúa como un regulador hormonal. Préstale la importancia que merece, considera estas pautas y podrás mejorar la calidad de tu descanso y a la vez regular tu peso y otros riesgos metabólicos.