Aquí tienes algunos consejos que te ayudarán a mantenerte encaminado en esta fase inicial.
  1. Lleva el plan de alimentación. Durante las próximas 2 semanas, haz todo lo posible por seguir el plan de alimentación. El mismo ha sido diseñado con un balance de alimentos y una combinación saludable de proteínas, hidratos de carbonos y grasa para que tu metabolismo funcione perfectamente, y te sientas con energías para incrementar tu actividad física. Si necesitas hacer algún cambio al mismo, puedes enviarme una consulta privada a mi correo y discutimos nuevas opciones.
  2. Toma control de las porciones en tus comidas. Las porciones recomendadas en el plan de alimentación están diseñadas según las calorías que tienes en tu Plan. Puedes utilizar las tazas de medir para controlar la cantidad del arroz, las habichuelas, pasta, papas, viandas y puedes utilizar una balanza de alimentos para pesar las carnes. Recuerda que estas mediciones son con los alimentos ya cocidos. Si te das cuenta que estas satisfecho con menos, tal vez necesites menos calorías de las que yo te prescribí, respeta estas señales y come hasta que estés saciado pero no incómodamente lleno.
  3. Prefiere los alimentos densos en nutrientes en lugar de los alimentos densos en calorías. La “densidad de nutrientes” es un concepto muy importante a la hora de seleccionar los alimentos que constituyen nuestra dieta y el menú. Un alimento denso en nutrientes es aquel que aporta muchos nutrientes en relación con sus calorías; vitaminas, minerales y fitoquímicos, esenciales para el buen funcionamiento del sistema inmunológico. Los alimentos que son muy densos en energía, normalmente son aquellos altos en calorías vacías, como las comidas rápidas, harinas refinadas, alimentos muy altos en azúcar y grasas “trans”. Tu cuerpo necesita nutrientes, si solo le das calorías vacías, no estará satisfecho y seguirás con hambre.
  4. Evita el alcohol. El sobrepeso surge por una suma de razones que llevan a acumular libras de más, ya que junto con el consumo regular de alcohol se encuentran otros factores como el consumo elevado de alimentos procesados y la picadera entre horas, de alimentos densos en calorías. El alcohol se acumula en forma de grasa en nuestro organismo muy rápidamente y afecta la absorción de muchas vitaminas y minerales. Por otra parte, la ingesta de alcohol conduce a la deshidratación causando fatiga, lo cual provoca que no seas capaz de ejercitarte como es recomendado.
  5. Saca tiempo para ejercitarte. Una de las mayores excusas que ponemos a la hora de realizar ejercicioes la falta de tiempo. Ciertamente, muchas veces nuestro ritmo de vida no nos deja espacio para prestar atención a nuestras necesidades. Sin embargo, párate a pensar, ¿Estás seguro de que no tienes 30 minutos 5 días a la semana? Seguro que sí, aunque no lo creas puedes sacarlos. Puedes levantarte un poco antes y/o acostarte un poco más tarde, y con sólo levantarte 15 minutos antes y acostarte 15 minutos más tarde tendrás los 30 minutos que necesitas diarios. También puedes reducir el tiempo que le dedicas a ver la televisión e invertirlo en ti. ¡Busca el tiempo, organiza tu agenda y dale prioridad a tu salud y bienestar!